
TERAPIAS PARA LA MUJER
Terapia menstrual
Todo síntoma es un aviso de nuestro cuerpo de que algo no anda bien. Él nos dice; cuidado, por ahí no, y también; por ahí sí. Si conectamos con nuestro cuerpo, lo sentimos, le escuchamos, y le damos la oportunidad de expresarse, podremos entender muchas cosas.
El cuerpo es como una antena parabólica muy potente. Somos seres energéticos. De hecho somos más energía que materia. Así como los cinco sentidos captan información del entorno que nos rodea, hay sentidos que no están contemplados en la educación científica que hemos recibido desde pequeñas. Estos receptores energéticos captan cambios en la vibración del entorno, para poder adaptarse. Para saber si podemos quedarnos, o debemos irnos. Los animales saben cuando deben irse de un lugar porque un desastre va a suceder. Simplemente lo saben. Y no es por su oído ultrasensible. Todas estaremos de acuerdo en que hay algo más. Y eso es lo que nos enamora de ellos.
Nuestras mascotas entienden cuando estamos tristes y cuando estamos felices. También cuando estamos enfermas. Ellas lo saben. Sin más.
Nos hemos separado de nuestra naturaleza animal. Como si eso fuera algo de lo que avergonzarse. Como si ser humano fuera superior. Pero es algo que ya no podemos negar más. La naturaleza reside también en nuestros cuerpos físicos. Tan perfectos que se ajustan solos. Únicamente debemos darles el espacio que pide. Pero, ¿cómo saber qué pide?
En terapia menstrual vamos a descifrar el idioma secreto que usa nuestro cuerpo para comunicarse con nosotras. Realizando análisis profundas en conjunto para llegar a entender qué está pasando, y buscando la mejor manera para recuperar el equilibrio, espiritual, mental y físico.
Nos apoyaremos de las plantas para mejorar los síntomas, sin perder de vista el autocuidado y autoconoimiento.
